[Huelga 15-O] Movilización, represión y resistencia en Madrid, Barcelona y València

Equipo editorial de Servir al Pueblo

Como estaba previsto, la Huelga General de 24 horas del miércoles 15 de octubre fue una gran jornada de lucha internacionalista. Hubo más de 200 concentraciones y manifestaciones en ciudades y pueblos de todo el Estado español, así como miles de piquetes frente a grandes empresas y universidades. Varios locales de negocios colaboracionistas con el genocidio, como McDonalds o Burguer King, fueron saboteadas o atacadas. También hubo cortes de carretera, levantamiento de barricadas y múltiples enfrentamientos con la policía, que atacó a los manifestantes en distintas ciudades.

Los momentos de mayor tensión se vivieron en Barcelona y en València. En Barcelona, se cortó la Autopista del Mediterráneo-AP7, hubo fuertes piquetes violentos y se levantaron barricadas. También se atacó el Consulado de Israel con cohetes y petardos, mientras hubo varios enfrentamientos con la policía. Fueron detenidas 15 personas. En València, 3 personas fueron detenidas de madrugada cuando realizaban sabotajes a negocios colaboracionistas con el genocidio. Los enfrentamientos más duros se vivieron cuando miles de manifestantes trataban de boicotear el partido de baloncesto entre el Valencia Basket y el Hapoel de Tel Aviv. La policía cargó varias veces y disparó pelotas de goma, causando al menos dos heridos y resultando 5 personas detenidas.

Como es costumbre en este tipo de luchas, los grandes medios de comunicación al servicio de los imperialistas, no han informado sobre la huelga, o le han dado muy poca importancia. En este artículo hacemos una recopilación de imágenes y vídeos de la jornada de lucha en Madrid, Barcelona y València. Si el lector quiere colaborar con nuestro periódico, puede enviarnos material audiovisual a nuestro correo electrónico. En los próximos días subiremos más materiales.

Madrid

Manifestación en Madrid. Fuente: El Salto.
Piquete en la Universidad de Alcalá de Hernares. Fuente: Corredor en Lucha.
Piquete en Indra. Fuente: Corredor en Lucha

Barcelona

Manifestante ataca Burguer King. Fuente: La Directa.
Corte de carretera. Fuente: El Salto.

València

Empresas colaboracionistas con el genocidio fueron atacadas por la madrugada. Hubo 3 personas detenidas en estas acciones. Fuente: El Levante.
Piquete en la Universitat Politécnica de València. Fuente: imagen propia.
Hubo una pequeña marcha – piquete móvil que pasó por la sede de España 2000, partido fascista. Fuente: imagen propia.
Manifestante porta un cartel con la consigna «Resistencia no es terrorismo» durante la manifestación del mediodía. Fuente: El Levante.
Activistas repartieron panfletos bajo la consigna «Resistencia no es terrorismo» y firmado por el Comité Revolucionario de València. Fuente: imagen propia.
El Comité Revolucionario de València participó en la marcha portando el estandarte de la Liga Antiimperialista. Fuente: imagen propia.

Por la tarde, estaba planificada una concentración a las 18:00h frente al Roig Arena (cuyo dueño es Juan Roig, dueño de Mercadona) para evitar el partido del Valencia Basket contra el Hapoel Tel Aviv. Desde el principio hubo un fuerte despliegue policial de más de 500 antidisturbios, con unidades canina y de subsuelo. También había drones y helicopteros utilizados para controlar y amedrentar a los manifestantes:

Helicóptero vuela sobre los manifestantes. Fuente: imagen propia.

Cuando acabó el límite establecido para la concentración, cerca de las 20:00h, un líder oportunista de las organizaciones que convocaron la movilización anunció por megáfono que, «por seguridad», desconvocaban la movilización y llamaban a los manifestantes a irse. Este anuncio, en primer lugar, enfureció a las masas, pues querían permanecer en la concentración y seguir denunciando la complicidad de la policía con el sionismo. En segundo lugar, evidenció cómo el oportunismo dice defender al pueblo palestino, pero solo trafican con la causa palestina para sacar rédito personal (conseguir puestos y sillones en sindicatos burocráticos o partidos parlamentarios, o simplemente prestigio personal debido al ego y soberbia). En tercer lugar, propagaron desmoralización, que ya no se podía luchar y que «estaba todo el pescado vendido». El anuncio de la desmovilización dio la excusa perfecta a la policía para cargar y desalojar a todos los manifestantes. En la práctica, los líderes oportunistas vendieron a las masas y favoreció la violencia policial.

Muchos se negaron a abandonar, cerca de 700-1000 personas. La policía cargó con violencia y también disparando pelotas de goma. Varios policías, vestidos de paisano, se infiltraron entre los manifestantes para actuar como provocadores y que se atacase allá donde la policía quería que les atacasen. Carga tras carga, la masa de manifestantes era cada vez menor, pero muchos seguían resistiendo. Finalmente, la concentración se disolvió con 5 detenidos y al menos dos personas atendidas por los servicios sanitarios.

Detenciones en los alrededores del Roig Arena. Fuente: El Levante.